1 timoteo 3;16

E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad:

Dios fue manifestado en carne,

Justificado en el espíritu,

Visto de los ángeles, 

predicado a los gentiles,

Creído en el mundo,

Residido arriba en Gloria.

Se sabe que este versículo era un canto , ya que las palabras riman, y cumplen con la gramática de la poesía Romana, del siglo primero.

en la escritura original:

καὶ ὁμολογουμένως μέγα ἐστὶν τὸ τῆς εὐσεβείας μυστήριον· Ὃς ἐφανερώθη ἐν σαρκί, ἐδικαιώθη ἐν πνεύματι, ὤφθη ἀγγέλοις, ἐκηρύχθη ἐν ἔθνεσιν, ἐπιστεύθη ἐν κόσμῳ, ἀνελήμφθη ἐν δόξῃ.

Este versículo es en primer lugar una declaración de la trinidad de Dios, y ha sido muy estudiado y también criticado por aquellos grupos religiosos que no creen en el Dios tripartito. Pero dejando eso de lado quiero simplemente meditar en lo hermoso del texto, y en el momento en que fue cantado. que le da aun mas valor y hermosura. Pablo comienza con esta exclamación: grande es el misterio de la piedad, en la Roma del primer siglo, todos los hombres debían   cada ves que se les era requerido honrar a su gobernante diciendo" grande" es le Cesar, grande es el emperador, y de la misma manera alababan a sus dioses, grande es Zeus, grande sea Minerva etc, Pablo hace lo mismo, para que los Romanos- Cristianos entendieran.

En Romanos 10, el apóstol habla acerca de la gran promesa de Dios; que todo aquel que clame el nombre de Jehová sera salvo, pero dice, que aunque se confiese con la boca debe creerse con el corazón, si un hombre no decidía darle honor al Cesar perdía la vida, Pablo dice que a aquel que negare a Cristo, Cristo le negara. En este escenario se cantaban estos himnos, nadie cantaría estas verdades  si realmente no creyera en ellas, si solamente fuera unas palabritas contagiosas que repetir para quitar el aburrimiento, me imagino que en medio de sus reuniones en la madrugada antes de que los demás despertaban,  cantaban casi como en un susurro la inescrutables riquezas de Cristo, como comento Josefo el historiador.
Cuando cantamos con el corazón, con una conciencia plena de las palabras que estamos usando, esas palabras tienen peso, son eternas. La música no puede ministrar nuestras vidas si las palabras, si las ideas, son difusas, ya que solamente a través de la predicación del evangelio podemos ser salvos, y a través del evangelio podemos crecer, la música es una excelente forma de predicar ese mensaje, pero adorar es solo a través del conocimiento y en la  Fe de la  palabra de Dios.                                          

por: D. Fernando Rmz